Centroamérica. Bajo el amparo del Proyecto Mesoamérica, los países centroamericanos lanzaron la Estrategia de Iluminación Eficiente, mediante la cual buscan promover políticas y prácticas orientadas a reducir la utilización de lámparas incandescentes y avanzar en la transición hacia una iluminación eficiente.
Esta es una respuesta a la necesidad urgente de apoyar los esfuerzos relativos a mitigar el cambio climático, a través de una reducción en el consumo de energía eléctrica proveniente de combustibles fósiles, y por ende, una disminución en la emisión de dióxido de carbono (CO2) y gases de efecto invernadero desde América Central.
El proyecto también incluyte la sustitución de lámparas incandescentes y el uso de lámparas con mayor eficiencia, para reducir la carga de energía en horas pico y las emisiones de dióxido de carbono.
En el caso de Centroamérica, según datos de Programa de Naciones Unidas para el Medio Ambiente (PNUMA), la energía eléctrica producida a partir del consumo de combustibles fósiles alcanza los 59.61 TWh (Terovatio hora) al año, equivalentes a una emisión total de 73.54 toneladas métricas de dióxido de carbono. De ese consumo total, el 13%, 7.67 TWh, es utilizado para la iluminación del sector residencial, lo que equivale a una emisión de 2.83 toneladas métricas de dióxido de carbono anualmente.
La Estrategia cuenta con el apoyo financiero y técnico del PNUMA, a través de la Iniciativa En.lighten y el Portal Regional para la Transferencia de Tecnología y la Acción frente al Cambio Climático en América Latina y el Caribe (REGATTA), quienes aportaron una Cooperación Técnica que asciende a US$300.000.
Los beneficiados serán Guatemala, Belice, El Salvador, Honduras, Nicaragua, Costa Rica, Panamá y República Dominicana. La Estrategia de Iluminación Eficiente en Centroamérica se espera esté finalizada en noviembre de 2013.