Venezuela. El último sencillo de éxito de Justin Quiles “La Botella” ha inspirado un desafío entre su legión de devotos fans que los llama a bailar al ritmo de esta canción con una botella en la cabeza sin que ésta se caiga.
Si bien sus fanáticos pueden lograr esta hazaña con diversos grados de éxito, mantener un sentido del equilibrio parece ser algo natural para esta estrella nacida en Puerto Rico, no solo en sus suaves movimientos en el escenario, sino también en la forma en que equilibra diferentes influencias musicales en su sonido de reggaetón.
Ambos estuvieron en plena exhibición este diciembre cuando Quiles hizo su primera aparición venezolana en seis años, dando un concierto, con la producción a cargo de Oz Shows, en la Universidad Santa María de Caracas.
Moviéndose sin esfuerzo con él a lo largo de su set de 16 canciones, se encontraba un espectáculo de luces vívidamente colorido diseñado por Jeremy Danis de Oz Shows, con producción de Edgar Figuera y programación de Milton de la Cruz que contó con 50 accesorios de CHAUVET Professional.
El anclaje de la plataforma fueron sus 24 accesorios Rogue R1 FX-B. Las unidades lineales RGBW, cada una con cabezas móviles de cinco píxeles mapeables y controladas de forma independiente, se colocaron en una rejilla de armazón superior que abarcó todo el ancho del escenario.
Algunas de estas luminarias se colgaron en vigas orientadas horizontalmente, mientras que otras se colocaron en líneas verticales. Esta configuración abrió una amplia gama de opciones de diseño, algo que Danis y el equipo de producción aprovecharon al máximo al orientar las cabezas móviles independientes en múltiples direcciones.
En ocasiones, el equipo de diseño había apagado algunas de las luminarias FX-B, mientras que otras unidades brillaban intensamente. Coreografiados en diferentes patrones en lo alto, los accesorios fluían a la perfección con los suaves movimientos de Quiles y sus bailarines, mientras que al mismo tiempo añadían una dimensión vertical inmersiva al escenario. Su intensa salida (6.008 lux a cinco metros) junto con su estrecho ángulo de haz les permitió atravesar otras fuentes de luz y atmósferas.
Agregando a la audacia del diseño, mientras creaban un poderoso acompañamiento para la actuación de Quiles, estaban los 14 accesorios STRIKE 4 de la plataforma. El brillo blanco cálido de estas unidades de alto rendimiento también ayudó a crear una atmósfera inmersiva para canciones seleccionadas.
También se incluyeron en la plataforma 12 luminarias COLORado Batten Quad 6. Al igual que las cinco cabezas móviles del Rogue R1 FX-B, los seis LED RGBA de este wash lineal se pueden controlar individualmente, una característica que generó aún más oportunidades de diseño para el equipo de OZ Shows.
Equilibrando estas muchas opciones creativas con tanta destreza como el mejor bailarín de La Botella, ofrecieron un espectáculo de luces que se movía con la elegante sedosidad del artista en el escenario.