Internacional. Las redes fijas de banda ancha podrían estar en jaque si no se toman las medidas necesarias para afrontar el aumento en el consumo de video, que crecerá significativamente al 2020. Estos son los resultados de un estudio de Bell Labs, la división de investigación de Alcatel-Lucent.
Este aumento, que estará jalonado por la masificación de smartphones y tablets, hará que en Estados Unidos a 2020 se pase de 4,8 horas diarias que consume de video una persona, a siete. Además, habrá un crecimiento de 12 veces en los contenidos de video por internet o en los servicios en la nube.
Este consumo de video estará ligado a los contenidos de video bajo demanda tendrán un papel protagónico en los próximos años. Pasarán de un 33% hasta un 70% al año de referencia, esto significa que la televisión tradicional tiene un reto mayor para no perder ese mercado.
"El suministro de vídeo desde la nube y desde redes de distribución de contenidos a las tabletas, televisiones y teléfonos inteligentes supone una apasionante oportunidad para conseguir nuevos ingresos por parte de los proveedores de servicios de comunicaciones, pero esto sólo será posible si están preparados"., aseguró el director técnico de Alcatel-Lucent, Marcus Weldon.
Otro factor que aumentará el consumo de internet son las redes IP. De acuerdo con Bell Labs, la concentración de los servicios teléfonía, televisión e internet en redes IP en los hogares, generará una mayor presión, pues así es más eficiente la prestación del servicio pero los usuarios exigen redes más rápidas a medida que aumenta el consumo.
Concluye Marcus Weldon que “esta investigación revela claramente que la frontera de las redes IP tanto fijas como móviles ofrece la mayor oportunidad para mejorar las prestaciones de la red. Al mismo tiempo, es también la mayor fuente de riesgo si no se gestiona apropiadamente".